La lectura y sus beneficios para el desarrollo cognitivo infantil.

Las funciones cerebrales superiores, el desarrollo, las competencias y la experiencia son términos fundamentales para que los niños y niñas se relacionen con el mundo exterior, ya que estos términos posibilitan el desarrollo de las etapas del pensamiento, el lenguaje, la actividad motora, sensorial, es así que durante la primera infancia se debe brindar la estimulación necesaria que facilite desarrollar las habilidades y capacidades de manera integral.

Otro aspecto necesario, para prevalecer en los niños es la maduración cerebral, ya que logra aportar en el desarrollo del aprendizaje pedagógico de las funciones cerebrales superiores como lo es la lectura, consecuente a lo anterior, cabe mencionar que es importante facilitar estrategias basadas en experiencias cognitivas, lingüísticas, sociales y emocionales logrando contribuir en el aprendizaje de los infantes.

Como la lectura juega un papel fundamental en las funciones cerebrales superiores, es por ello que se debe rodear a la población infantil de diferentes andamiajes que faciliten la adquisición del proceso lector y esto se logra a través de estrategias vivenciales con libros como: el libro álbum, el libro informativo y juegos que ayudan al desarrollo cognitivo y lingüísticos en las primeras etapas de la vida, etapa donde experimenta la vida escolar.

Para Gómez-Veiga, García-Madruga, Contreras, Elosúa y Vila (2013) indican que la comprensión lectora resulta de procesos mentales que integran la información que aporta el autor del texto y desde el lector a partir de sus conocimientos sobre el lenguaje y el mundo físico y social; por tanto, la comprensión lectora emerge de la decodificación y codificación del lenguaje oral, la información recibida del contexto ambiental y la estructura del texto.

Cuetos y Domínguez (2012) definen la lectura como procesos de transformar los signos gráficos que aparecen sobre un papel o una pantalla en los sonidos, refiriéndose este último al caso de la lectura en voz alta, o en significados en el caso de lectura silenciosa comprensiva. Para lo anterior, describen los autores que se requieren de procesos u operaciones cognitivas complejas, iniciando con el procesamiento de los estímulos visuales entre los que se encuentran la identificación de las letras, conversión de estímulos visuales en lingüísticos, conceptuales y motores. La lectura facilita el buen desarrollo de la adquisición de los procesos cognitivos y lingüísticos en la niñez, para ello se requiere de las habilidades que se asocian con el procesamiento fonológico, el cual consiste en el conocimiento tácito y evidente de la estructura de los sonidos de las palabras; la velocidad de la denominación, siendo la capacidad para nombrar o evocar tan rápido como sea posible los estímulos visuales y familiares, y de los elementos significativos que conlleva el aprendizaje en la niñez como son las experiencias sensoriales, el aprendizaje significativo y la activación de los dispositivos básicos del aprendizaje, entre muchos otros.

Retomando todo lo anterior, brindar una estimulación a temprana edad a través del mundo de los cuentos, mitos, leyendas, canciones de cuna, imágenes libros acordes a cada edad que permitan la interacción social, la comprensión de las emociones, sentimientos, deseos aprendizaje significativo, el desarrollo del sistema morfológico, fonológico, enriquece el vocabulario, la imaginación y la creatividad. Por ello, la lectura en la primera infancia se debe considerarse como una caja de herramienta que posibilite la interacción con el entorno familiar, escolar y social.

Gestión y Acción a través de diversos procesos y proyectos en el que la población infantil y la lectura son el centro de atención ha contribuido para que los niños desarrollen a través del uso de diferentes lenguajes su vocabulario, mejoren la comprensión lectora, potencialicen un pensamiento más crítico; exploren diferentes perspectivas y culturas, lo que fomenta la empatía y una comprensión más profunda de los demás. Todas estas experiencias han marcado a la organización en el marco de la responsabilidad social corporativa y la de los aliados mostrando su compromiso con la educación y el bienestar infantil.